La honestidad es una de las piedras angulares de cualquier relación sólida y saludable. Sin embargo, hay momentos en los que una pequeña mentira puede ser más beneficiosa que la verdad absoluta. Estas mentiras, lejos de dañar, pueden evitar conflictos innecesarios y fortalecer los lazos de complicidad entre ambos. Lo importante está en saber cuándo es adecuado usarlas y siempre tener en mente el bienestar de nuestra pareja.
La psicóloga Mª Jesús Vázquez Leal lo resume así: «Las mentiras piadosas son como un bálsamo que puede aliviar un dolor momentáneo, pero a largo plazo pueden erosionar la confianza y dañar la relación«. Es más, un estudio publicado en el Journal of Personality and Social Psychology reveló que el 92% de las personas han mentido a su pareja en algún momento, y la mayoría lo han hecho para evitar conflictos o proteger los sentimientos de su ser querido.
Momentos en los que es mejor mentir en una relación
¿Mentira piadosa o engaño dañino? La línea divisoria puede ser difusa, por eso es crucial analizar cada situación con cuidado y sensibilidad.
1. El talento oculto en la cocina
Imagina que tu pareja ha decidido sorprenderte con una nueva receta que ha encontrado en internet. Han pasado horas en la cocina, y cuando llega el momento de probar el plato, te das cuenta de que el resultado no es exactamente delicioso. En este caso, una mentira puede evitar herir sus sentimientos y desmotivarlos. «¡Está delicioso, cariño!», puede ser la frase que les anime a seguir practicando y mejorando sus habilidades culinarias.
2. El desastre del peinado
Tu pareja ha decidido cambiar de look y ha salido del salón de belleza con un peinado que no le favorece. Puede que se sientan inseguros y necesiten tu apoyo. En vez de ser brutalmente honesto y decir que el peinado no les queda bien, una pequeña mentira del tipo «¡Te ves genial!», puede darles la confianza que necesitan hasta que encuentren un estilo que realmente les favorezca.
3. La sorpresa fallida
Has planeado una sorpresa para el cumpleaños de tu pareja, pero por alguna razón, se entera antes de tiempo y te pregunta directamente al respecto. Para mantener la ilusión y la emoción del momento, una pequeña mentira para desviar la atención puede mantener la sorpresa viva. «No tengo idea de lo que hablas, amor» podría ser la respuesta que preserve la sorpresa.
4. El regalo menos esperado
Tu pareja te ha hecho un regalo que claramente no es de tu gusto o no es algo que necesitabas. En vez de ser completamente honesto y decir que no te gusta, puedes optar por una pequeña mentira que valore su esfuerzo: «¡Gracias! Justo lo que necesitaba.» Esto puede evitar herir sus sentimientos y demostrar que aprecias el gesto más que el objeto en sí.
Una mentira puede ser menos mentirosa que una verdad bien escogida
Jean Rostand
5. El talento en la pista de baile
Han decidido ir a una fiesta y tu pareja quiere mostrarte sus movimientos de baile. Puede que no sean los mejores, pero están disfrutando el momento y quieren compartirlo contigo. Una mentira piadosa del estilo «¡Bailas increíble!», puede fomentar la diversión y la conexión en lugar de arruinar el momento con una crítica honesta.
6. La película favorita
Tu pareja tiene una película favorita que te parece aburrida o poco interesante. Para no desilusionarlos y seguir compartiendo momentos juntos, una pequeña mentira como «Sí, es muy buena» puede ayudar a mantener el ambiente positivo. Después de todo, lo importante es disfrutar del tiempo juntos, no tanto la película en sí.
7. El atuendo inusual
Si tu pareja elige un atuendo que no le favorece y te pide tu opinión, decir «Te ves increíble» puede evitar que se sientan inseguros. Apoyar su estilo les da confianza en su elección. Por ejemplo, si tu pareja usa una combinación de colores que no te agrada, podrías decir: «Me encanta cómo te atreves con nuevos estilos, ¡te ves genial!»
8. La broma que no causó gracia
Cuando tu pareja hace una broma que no es divertida, decir «¡Qué gracioso!«, puede evitar que se sientan avergonzados. Fomentar un ambiente de humor y apoyo es esencial. Por ejemplo, si cuentan un chiste en una reunión y nadie se ríe, podrías decir: «Me hiciste reír, tienes un gran sentido del humor.»
9. El proyecto fallido de bricolaje
Si tu pareja intenta reparar algo en casa y no lo logra, decir «Buen intento, seguro que la próxima vez sale mejor» puede animarles a seguir aprendiendo. Valorar su esfuerzo es crucial. Por ejemplo, si intentan arreglar una lámpara y no funciona, podrías decir: «Aprecio mucho que te esfuerces en mejorar nuestra casa, ¡lo lograrás!»
10. El intento de hablar otro idioma
Cuando tu pareja trata de hablar en un idioma que no domina y comete errores, decir «Lo estás haciendo muy bien» puede motivarles a seguir practicando. Apoyar su esfuerzo es fundamental para su aprendizaje. Por ejemplo, si intentan pedir en un restaurante en otro idioma y se equivocan, podrías decir: «Te admiro por intentarlo, ¡lo hiciste genial!»