¿Alguna vez te has sentido como si estuvieras mendigando amor en una relación? Es una situación dolorosa que muchas personas experimentan en algún momento de sus vidas. Pero, ¿qué significa realmente «mendigar amor» y cómo podemos evitar caer en esta trampa emocional? En este artículo, vamos a ver cuatro actitudes que te hacen mendigar amor y cómo puedes cambiarlas para tener relaciones más saludables y satisfactorias.
Mendigar amor suele estar relacionado con la necesidad de pertenencia, seguridad emocional y satisfacción de necesidades emocionales básicas. Sin embargo, es crucial diferenciar entre un amor saludable y un amor desesperado. La búsqueda desesperada de amor puede ser perjudicial, ya que puede generar dependencia emocional y comportamientos poco saludables en la búsqueda de relaciones. Esto incluye la tendencia a aceptar cualquier tipo de relación por miedo a la soledad, incluso si estas no son saludables o felices.
La psicóloga Raquel Aldana enfatiza que el amor que se mendiga no es amor, sino una falta de dignidad y respeto hacia uno mismo. Mendigar amor implica pedir algo de forma desesperada y humillante, lo cual es una actitud poco saludable para nuestra propia autoestima y bienestar emocional. Además, cuando se busca amor de manera desesperada, se tiende a depositar toda la felicidad y el bienestar emocional en la otra persona, lo cual puede llevar a relaciones desequilibradas y a problemas de ansiedad, inseguridad y baja autoestima.
1. La necesidad desesperada de aprobación
Una de las actitudes más comunes que llevan a mendigar amor es la necesidad desesperada de aprobación. Esto significa que estás dispuesto a hacer cualquier cosa para que alguien te ame y te acepte, incluso si eso significa sacrificar tu propia felicidad y bienestar.
En lugar de ser una persona segura de ti misma, te conviertes en un complacedor crónico, haciendo lo que sea necesario para mantener contenta a la otra persona, incluso si eso significa ir en contra de tus propios valores y deseos.
¿Cómo puedes cambiar esto?
Para dejar de mendigar amor, necesitas comenzar a amarte a ti mismo primero. Aprende a valorarte y a aceptarte tal como eres, con todas tus imperfecciones. La aprobación de los demás no debe ser la fuente principal de tu autoestima. Cuando te amas a ti mismo, atraerás a personas que te amen por quien eres realmente, y no por lo que estás dispuesto a hacer por ellos.
2. El miedo a la soledad
El miedo a la soledad es otra actitud que puede llevarte a mendigar amor. Si sientes que no puedes estar solo o que necesitas a alguien a tu lado para sentirte completo, es probable que termines en relaciones tóxicas o poco saludables para evitar estar solo.
Cuando tienes miedo a la soledad, es más probable que te conformes con cualquier tipo de amor, incluso si no es lo que realmente quieres o necesitas. Esto puede llevarte a una relación en la que te sientes atrapado e infeliz, pero te sientes incapaz de dejarla porque temes quedarte solo.
¿Cómo puedes cambiar esto?
El primer paso para superar el miedo a la soledad es aprender a disfrutar de tu propia compañía. Aprende a estar en soledad sin sentirte solo. Haz cosas que te hagan feliz y que te permitan crecer como persona. Cuando te sientas cómodo estando solo, podrás elegir relaciones que sean verdaderamente satisfactorias en lugar de conformarte con cualquier cosa.
3. La falta de límites personales
Otra actitud que te hace mendigar amor es la falta de límites personales. Si no tienes límites claros en una relación y permites que la otra persona te trate de manera irrespetuosa o te manipule, estás mendigando amor de una manera u otra.
Cuando no tienes límites, es fácil que te aprovechen emocionalmente. Puedes estar dispuesto a hacer cualquier cosa para mantener la relación, incluso si eso significa tolerar el maltrato o la falta de respeto.
¿Cómo puedes cambiar esto?
Aprender a establecer y mantener límites saludables es esencial para tener relaciones sanas. Esto significa comunicar tus necesidades y expectativas de manera clara y firme. No debes tener miedo de decir «no» cuando algo no te hace sentir bien. Las personas que te aman de verdad respetarán tus límites, y las que no, probablemente, no merezcan tu amor.
4. La dependencia emocional
La dependencia emocional es una actitud que te hace mendigar amor de manera constante. Si sientes que no puedes ser feliz sin la otra persona, o que tu vida gira completamente en torno a la relación, estás en un terreno peligroso.
Cuando dependes emocionalmente de alguien, te conviertes en una carga emocional para esa persona, y eso puede llevar a que se sientan agobiados y se alejen. Además, tu felicidad debe depender de ti mismo, no de otra persona.
¿Cómo puedes cambiar esto?
Trabaja en tu independencia emocional. Encuentra actividades y pasiones que te hagan feliz por ti mismo, sin depender de una relación para ello. Aprende a ser autosuficiente emocionalmente y a disfrutar de tu propia compañía. Cuando eres una persona emocionalmente fuerte y autónoma, atraerás relaciones más saludables y equilibradas.
Así que, ¡deja de mendigar amor y comienza a amarte a ti mismo y a construir relaciones saludables! Tu felicidad y bienestar lo valen.