Muchos chicos, por razones culturales, sociales o incluso personales, se resisten a abrir sus puertas emocionalmente hablando. Te habrás dado cuenta de que tu chico no te cuenta sobre lo que siente, sus temores o miedos. Esto no significa que no sienta amor, es simplemente que ellos se expresan a su manera, pero que por dentro sienten un amor intenso cuando realmente están enamorados. Pero, ¿qué puedo hacer para que mi chico me hable de sus emociones? El proceso y tiempo no es de un día a otro, pero puedes hacer varias cosas para que al final del día, tu pareja hable abiertamente sobre lo que siente.

Es más, sabías que un estudio de la Universidad de California reveló que las mujeres procesan las emociones en una zona del cerebro diferente a los hombres. Esto significa que ellos pueden tener dificultades para identificar y expresar sus sentimientos. ¡No te lo tomes personal! No es que no te quiera, es que su lenguaje emocional es diferente.

Crea un entorno seguro

¿Sabías que el ambiente en el que estamos influye en cómo nos sentimos y nos expresamos? Imagina que estás en un concierto de tu grupo favorito, rodeada de gente que disfruta de la música tanto como tú. Te sientes parte de algo, ¿verdad? Pues algo así es lo que queremos crear con nuestra pareja, pero en versión "confidencias y sentimientos". Hacer que tu chico sienta que está en un entorno seguro es importante. Esto significa que cuando él comparta algo contigo, lo acoges sin críticas ni juicios. Piénsalo como si fueras una caja fuerte donde sus pensamientos y sentimientos están seguros.

Crear este espacio no es solo cuestión de decir "me puedes contar cualquier cosa", sino de demostrarlo con acciones. Es como cuando te preparas para una maratón de vuestra serie favorita; eliges el sofá más cómodo, apagas el móvil y te aseguras de que nada os interrumpa. Con las emociones pasa igual. Se trata de prestar atención, mostrar empatía y, sobre todo, validar sus sentimientos. Un simple "entiendo por qué te sientes así" puede ser reconfortante para tu chico. Y recuerda, aquí no hay respuestas equivocadas ni sentimientos que no valgan la pena compartir.

Elige los momentos adecuados

Imagina que intentas hablar de algo super importante mientras tu chico está demasiado concentrado con un videojuego o justo en medio de un partido de fútbol. Spoiler: probablemente no vaya bien. Encontrar el momento adecuado es crucial para hablar de sentimientos. Se trata de buscar ese momento en el que ambos estéis relajados y dispuestos a escucharos. Esto podría ser después de cenar, en ese paseo tranquilo de la tarde o mientras compartís un momento chill en casa.

¿Y cómo sabes cuál es ese momento? Bueno, a veces es cuestión de intuición y otras de simplemente preguntar. Un "¿Te viene bien si hablamos un poco?", puede abrir la puerta. Lo importante es que ambos os sintáis cómodos y sin prisas. Este no es el momento para conversaciones entre puertas o en los anuncios de la tele. Es ese instante en el que el mundo parece ponerse en pausa solo para vosotros dos. Ah, y un tip: apaga el móvil o ponlo en silencio. En estos momentos, WhatsApp puede esperar.

Haz preguntas abiertas

Si las conversaciones con tu chico suelen ser más del tipo "¿Qué tal el día?" con un "Bien" por respuesta, entonces, es hora de cambiar de táctica. Las preguntas abiertas serían perfectas para ti. Son ese tipo de preguntas que no se pueden contestar con un simple sí o no, obligando a quien responde a dar un poco más de sí.

Por ejemplo, en lugar de preguntar "¿Te ha gustado la película?", prueba con "¿Qué te ha parecido el personaje de...?" o "¿Qué parte de la película te ha movido más?". Estas preguntas invitan a una conversación más rica y a compartir opiniones y sentimientos. Es una manera de decir "me interesa lo que piensas y sientes", y eso, querida, es oro puro en cualquier relación. Además, estas preguntas demuestran que te importa conocer su mundo interior, sus pensamientos, y eso puede hacerle sentir valorado y comprendido.

Aprende a escuchar

A ver, ¿cuántas veces has estado "escuchando" a alguien mientras en realidad piensas en lo que vas a comer mañana o repasas mentalmente tu lista de tareas pendientes? Todos hemos estado ahí, pero cuando se trata de conectar con tu chico y hacer que se abra, la escucha activa es importante. No es solo oír lo que dice, sino escucharlo de verdad, con toda tu atención.

La escucha activa implica hacer contacto visual, asentir con la cabeza, hacer pequeños comentarios que muestren que estás siguiendo la conversación y, lo más importante, no interrumpir. Pues así se debe sentir tu chico, como si tuviera toda tu atención. Al final, esto le hará sentirse valorado y entendido, aumentando su confianza para compartir más en el futuro.

Refuérzale positivamente cuando hable de sus sentimientos

Vale, tu chico ha empezado a abrirse un poco más, ¿y ahora qué? Bueno, es el momento de celebrarlo. Mostrar aprecio por su apertura refuerza positivamente la acción. Si tus esfuerzos son reconocidos, te sientes motivado para seguir adelante ¿No? Pues con las emociones pasa lo mismo.

Un simple "Me encanta que compartas esto conmigo" o "Realmente valoro tu honestidad" puede hacer maravillas. No subestimes un agradecimiento sincero y no olvides, la próxima vez que comparta algo contigo, recuérdale lo mucho que significa para ti. Eso creará un círculo virtuoso de confianza.

Faltan palabras a la lengua para los sentimientos del alma

Fray Luis de León

Sé un ejemplo

"Ser el cambio que quieres ver" suena a como una frase típica, pero en este caso, es totalmente aplicable. Si quieres que tu chico se abra más, lidera con el ejemplo. Comparte tus propios sentimientos, tus alegrías, tus miedos, y cómo te ha ido el día de verdad, no solo un "bien" automático.

Mostrar tu vulnerabilidad no solo es valiente, sino que también demuestra que confías en él y que consideras vuestra relación un espacio seguro para ser uno mismo. Y recuerda, la autenticidad llama a la autenticidad. Si él ve que estás dispuesta a abrirte, es probable que se sienta más cómodo para hacer lo mismo.

No todo es ahora, ten paciencia

Si hay algo que aprender de todas esas series de Netflix que nos enganchan, es que las cosas buenas llevan su tiempo. Lo mismo ocurre con construir la confianza y la apertura emocional en una relación. No puedes esperar que tu chico se convierta en un libro abierto de la noche a la mañana. La paciencia es clave y debes saber gestionarla.

Dale espacio, tiempo y, sobre todo, mucho amor. Cada pequeño paso que dé hacia abrirse más es un gran avance en vuestra relación. Y como cualquier buena maratón de series, hay momentos de tensión, de emoción y de espera. Disfruta del proceso y celebra los pequeños momentos que vais construyendo juntos.

Respeta su proceso

Tal vez tu chico sea de los que necesitan más tiempo para procesar sus emociones antes de hablar de ellas, o quizás prefiere expresarse de otras maneras que no sean mediante palabras.

Respeta su proceso y sé flexible. Encuentra formas creativas de comunicación que se adapten a ambos. Puede que descubras que escribirse notas, compartir canciones que expresen cómo se sienten, o incluso actividades conjuntas como el deporte o el arte, os ayuden a conectar aún más.

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